martes, 7 de junio de 2011

Con el paso del tiempo..

Después de un tiempo, uno aprende la diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma, y uno aprende entonces, que el amor no significa acostarse y una compañía no significa seguridad…
Uno empieza a aprender que los besos no son contratos y los regalos recibidos no son promesas. Uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos bien abiertos. Uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy, porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad. Y después de un tiempo, uno también aprende que si es éste es demasiado, hasta el calorcito del sol quema. Aprende a plantar su propio jardín y decorar su propia alma, en lugar de esperar a que alguien le traiga flores. Aprende que realmente puede aguantar, que uno realmente es fuerte, que uno realmente vale… y uno aprende y aprende... Y con cada adiós uno aprende cada vez más…Con el tiempo aprendes que estar con alguien porque te ofrece un buen futuro, significa que tarde o temprano vas a querer volver a tu pasado. Con el tiempo comprendes que solo quien es capaz de amarte con tus defectos, sin pretender cambiarte, puede brindarte toda la felicidad que deseas. Con el tiempo te das cuenta de que si estas al lado de esa persona solo por acompañar tu soledad, irremediablemente vas a terminar no deseando volver a verla. Con el tiempo entendes que los verdaderos amigos son contados, y que el que no lucha por ellos tarde o temprano se verá rodeado solo de amistades falsas. Con el tiempo también aprendes que las palabras dichas en un momento de ira y enojo pueden seguir lastimando a quien heriste durante toda la vida. Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es solo de almas grandes. Con el tiempo te das cuenta de que aunque seas feliz con tus amigos, algún día llorarás por aquellos que dejaste ir. Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible. Con el tiempo comprendes que apresurar las cosas o forzarlas a que pasen ocasionará que al final no sea como esperabas. Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro, sino el momento que estabas viviendo justo en ese único instante. Con el tiempo ves que aunque seas feliz con los que están a tu lado, extrañarás inmensamente a los que ayer estaban contigo y ahora se han marchado. Y aprendes que hay tres momentos en la vida que uno no puede remediar: La oportunidad que dejaste pasar, la cita a la que no asististe, y la ofensa que ya pronunciaste. Con el tiempo también aprendes sobre el dinero, y entonces comprendes que podes comprarte una casa, pero no un Hogar; podes comprarte una cama, pero no hacerte dormir tranquilamente, podes comprarte un reloj, pero no te va a dar el tiempo, podes comprarte un libro, pero no conocimiento o lo que necesitas aprender, podes comprarte una posición, pero no sirve para tener respeto, podes comprarte medicinas y pagar la consulta al médico, pero no te va a dar salud, podes comprarte sangre, pero no vida, podes comprarte sexo, pero no amor.
Con el tiempo aprendes que la vida es acá y ahora, y que no importa cuántos planes tengas, el mañana no existe y el ayer tampoco, y también aprendes que intentar perdonar o pedir perdón, decir que amas, decir que extrañas, decir que necesitas, decir que queres ser amigo, ante una tumba, ya no tiene ningún sentido.
Pero desafortunadamente, todo esto lo aprendes sólo con el paso del tiempo.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario